Libre de conceptos, Txemy aborda esta exposición con un único reto, disfrutar de la pintura y vivir el momento actual. En su primera exposición después de su paternidad, incluye el color en sus habituales fondos oscuros, conjuga la geometría hasta ahora utilizada para sus letras (graffiti) en las calles de Barcelona, y las mezcla por primera vez con su pintura figurativa.
Hay un antes y un después de esta presentación. Antes el spray ocupaba el 99% de sus lienzos. Ahora pasa a ser utilizado únicamente como apoyo, como herramienta para la creación de detalles. El grosso de su pintura es ahora ocupada por esmaltes Eco. La conciencia del uso de materiales no contaminantes pasan a ser una orden, una prioridad a la hora de crear.
Txemy genera esta exposición en uno de los espacios de Tabakalera. Entre la instalación “Malas Madres/ Vidas suspendidas” de Jerónimo Hagerman y la muestra fotográfica “Vivian Maier. Una fotógrafa revelada “. Esta última le marca especialmente, inspirado por una de sus fotos principales: el autorretrato de Vivian en un escaparate. Txemy descubre en el juego de geometrías que se forma entre su rostro y su sombrero, en las luces y las sombras , en los volúmenes y decide que ese es el punto de partida para su propia muéstra en Arteuparte.
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